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Cómo organizar un workshop empresarial

Las empresas cada vez apuestan más por la realización de una actividad de team building que rompa con la rutina de los trabajadores y, a su vez, fomente otras conductas positivas dentro del equipo. Es una práctica que está muy de moda y proporciona resultados satisfactorios en la compañía. Por ello, se han habilitado varios espacios preparados para albergar este tipo de eventos. El workshop es una de las temáticas más escogidas como motivo de fomentar el team building empresarial.

 

cómo organizar un workshop empresarial

 

¿En qué consiste un workshop empresarial?

Los workshops son, básicamente, talleres en los que se imparte alguna que otra curiosidad. Tienen un alto carácter práctico por lo que requieren la involucración y participación activa de los asistentes. Su principal objetivo es la adquisición de alguna nueva habilidad a la vez que se fomenta el trabajo en equipo.

Este tipo de evento se caracteriza por tener una duración relativamente corta, de dos a cuatro horas. En ocasiones suelen abarcar diferentes temas para que sea más dinámico y también para que el número de personas implicadas sea mayor y de mayor variedad, lo que hace un evento aún más interesante.

El transcurso de un workshop está guiado por unos moderadores que comienzan con alguna idea de las principales temas del evento para que después, los propios asistentes sean los que cojan las riendas de la conversación. De este modo, las ideas fluyen y puede acabar en otros temas distintos del principal siempre y cuando los moderadores consideren que es de interés y sea beneficioso para los asistentes.

Por otro lado, otros workshops son organizados desde otro punto de vista. En caso de que se quiera tratar algún tema concreto de interés de la empresa, se suelen contratar a algún especialista que exponga su expertise y comparta sus ideas. De este modo la empresa se asegura un completo aprovechamiento del evento ya que los asistentes aprenderán los conocimientos que considera necesarios y de gran calidad. Además, es mucho más fácil de organizar al tener un cronograma cerrado.

 

 

¿Cómo organizar un workshop empresarial?

Para organizar un evento de este tipo, el primer paso es determinar el objetivo y cuál va a ser el tema que se va a abordar. Una vez esté decidido, los siguientes pasos son:

  • Organizar el material necesario para impartir la sesión. Crea una especie de guion físico sobre el cual los participantes puedan tomar notas para consultarlas posteriormente. Otro recurso de ayuda para conducir las sesiones puede ser un apoyo visual a modo de presentación.
  • En caso de que un especialista vaya a dar un taller, establecer un tiempo práctico o de dinámica de grupo es una opción bastante interesante. Romperá con la monotonía de la charla y hará que el evento sea mucho más llevadero.
  • Ronda final: muy importante priorizar la fase de conclusiones del evento donde se pueda resumir con varias ideas cuáles han sido los principales temas desarrollados.

La elección de la fecha del evento debe rondar aquellos periodos que motiven el inicio de algo nuevo, como un aprendizaje. Aquellos eventos de este estilo situados en fechas señaladas como vacaciones o Navidad tienen una aceptación un tanto menor. Aprovecha los inicios de ciclos para convocar un workshop.

La difusión y promoción del evento es otro de los factores que se debe planificar. Para este tipo de eventos funciona muy bien las invitaciones personalizadas a aquellas personas que sean de interés especial para aportar su experiencia y conocimientos. Convoca una sesión en streaming para aquellos asistentes que no puedan acudir. Repercutirá favorablemente sobre la reputación de la empresa y del evento en sí.

Por último, un papel muy importante en este tipo de eventos lo juega el lugar donde se celebre. El espacio escogido puede influir en gran medida en el transcurso del evento y en la satisfacción de los asistentes. A continuación, te mostramos cuáles son las características que deben tener estos espacios y algunas ideas para alquilar una sala de reuniones en Madrid.

 

 

Descubre los mejores espacios para celebrar un workshop empresarial

Los espacios escogidos para celebrar este tipo de eventos debe presentar unas características básicas:

  • Iluminación: la iluminación es un factor muy importante. Es capaz de modificar el estado de ánimo y predisposición de los asistentes por lo que lo más recomendable es que tenga una iluminación natural y clara.
  • Diseño: el diseño del espacio favorece el desarrollo de ciertas actividades y hace que el evento sea más o menos agradable en función de su estética. Debe ir acompañado de un mobiliario funcional y en la línea del estilo de la sala.
  • Sonido: la acústica es decisiva en un lugar donde se va a impartir una jornada de comunicación. Una buena acústica ayuda a comunicar mejor e impide ciertas incomodidades por parte de los asistentes.

Encontrar un espacio idóneo que reúna estos requisitos parece una tarea difícil. Sin embargo, Espazio32 es un lugar que ofrece salas de alquiler en Madrid orientadas a la realización de eventos empresariales. Un espacio de referencia para la celebración de workshops en Alcobendas.

 

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Las ventajas de Espazio32

Este centro cuenta con la sala Workshop, especializada en la realización de este tipo de eventos. Reúne todas las características para la celebración de un evento óptimo. Esta sala de 420 metros cuadrados tiene aforo suficiente para un gran número de invitados. Además, dispone de zonas gastronómicas y gradas móviles que hacen de anfiteatro, ideal para las presentaciones. Su decoración estilo industrial, otorga un toque moderno y sofisticado al lugar. Posee también la capacidad de crear diferentes zonas dentro de la misma sala, para aquellos casos en los que sea necesario crear distintos ambientes o rincones más privados.

En definitiva, uno de los lugares más impresionantes para la realización de workshops empresariales. Aunque también es posible celebrar otro tipo de eventos y actividades tipo cócteles, conferencias o incluso mercados solidarios.

La práctica de eventos empresariales en siempre un acierto. Invitar a tus asistentes a un workshop productivo es una apuesta segura que todos apreciarán y seguro que asistirán con gran entusiasmo. Además no solo aprender es el objetivo, las actividades de team building refuerzan los lazos empresariales y repercuten favorablemente sobre la productividad.